lunes, 25 de agosto de 2008

cumpleaños de ayer

Lucero cumplió 5. Compré regalo y fui. Hacía años que no iba a un cumpleaños infantil y , la verdad, no esperaba encontrarme con el pasado.
A cambio de unos pocos detalles estaba otra vez en una fiesta del año 89, en la que Marina, mi hija, cumplía 5. Las papas fritas, los panchos, los chizitos, (¿por qué les gustarán tanto los chizitos a los niños ?) la piñata, las bolsitas con caramelos , el cotillón y por supuesto la torta con sus velitas.
Solo tuve que cambiar la música y el merchandising de Xuxa por el de Casi angeles y Patito feo.
Me acerco a la mesa de los regalos y allí estaban: La Barbie, las medias, las remeritas, las hebillas de colores , el equipamiento completo para ser una princesa, los bebotes , y , como un saludo de la niñez de mis hijos, mi regalo: Una familia completa de pequeños ponys.

3 comentarios:

Juanhelo dijo...

Señora:

Usted no tiene ni idea de quién soy yo, sin embargo, yo creo conocerla un poco (también me gusta usar el "sin ambargo").

A usted la conocí primero a través de anécdotas que contaba su hijo Pablo, y luego por sus comentarios en el blog de él. Ahora creo que la conozco un poquito más, gracias a su propio blog.

Sepa que desde ya puede encontrar en mí un lector fiel. La felicito por enfrentarse a ese pánico aterrador de "y ahora qué diablos escribo?". un abrazo y espero su próximo "post".

Julián Herrera

Marina mandarina dijo...

Querido hermano pablo, como veras, madre solo hace referencia a mi persona en este post. Creo que lentamente se va develando el misterio del hijo favorito..
Sin mas, me rertiro.

Anónimo dijo...

Patricia: Como ferviente admirador de el blog de tu hijo Pablo y compañero de trabajo de tu ex marido digo, por fin encontré la raíz del talento literario de Pablo.
Saludos.
P.D.: Podrías ofrecer una rápida guía de buenos vinos de módico precio para acompañar las comidas?